EL CONOCIMIENTO

 Acabamos de comenzar un nuevo tema en clase de filosofía y voy a hablar con poco de lo que trata. Hemos empezado un tema que se llama “El conocimiento”, nos habla de la transformación de la sensibilidad en la razón.

Según yo he entendido, el conocimiento o conocer se basa en captar y entender la realidad en la que vivimos, y podemos hablar de dos tipos de conocimiento: el conocimiento sensible y el conocimiento intelectual. Hoy solo hablaré del conocimiento sensible que es donde hemos profundizado hasta ahora.

El hombre por naturaleza tiene que adecuarse al mundo, a la realidad donde tiene que vivir hasta que llegue la muerte y para eso necesita lo que llamamos “conocimiento sensible”, esto es conocer el mundo con nuestros sentidos los cuales son los encargados de que busquemos información necesaria para poder acomodarnos en el mundo que nos rodea.

                                                     

Para que el conocimiento procese su paso a través de los sentidos necesitamos percepciones, lo que significa que tenemos que captar distintas informaciones con nuestros sentidos, ya sean colores, luces, sonidos, si hace calor, si hace frio… etc.  Para poder realizar todo lo nombrado anteriormente necesitamos lo que llamamos estímulos que influyen en nuestros sentidos que son: olfato, vista, tacto, gusto y oído, tal influencia hace que aparezcan los impulsos nerviosos que se trasladan hasta nuestro cerebro donde los convertimos en información.

Y esto es todo, no sabía muy bien de qué hablar en esta entrada así que he optado por apoyarme en los apuntes de clase para explicar lo que es el conocimiento.